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Música

50 años de historia de Kraftwerk

Kaftwerk es un grupo alemán de música de vanguardia que hizo una contribución decisiva al desarrollo de la música electrónica.

Kraftwerk es un grupo alemán de música de vanguardia que hizo una contribución decisiva al desarrollo de la música electrónica. El grupo lo formaron Ralf Hütter y Florian Schneider en 1970, pero su fama la hicieron como cuarteto, con Wolfgang Flür y Karl Bartos.

Las técnicas que introdujeron en su música, así como el equipo que desarrollaron, son hoy omnipresentes en la música moderna ya que son considerados por muchos como los padres de la música electrónica que si bien ya venia de tiempo atrás, ellos fueron los responsables de llevarla a un nuevo nivel y asentar las bases de lo que hoy conocemos, formando un estilo propio y no solo experimentando con sonidos sino dándoles una personalidad propia. Su influencia en la música de la segunda mitad del Siglo XX, hace que se compare su legado con el de los Beatles. Kraftwerk fueron uno de los primeros grupos en usar únicamente instrumentos electrónicos. Incluso muchas de las partes de voz de las canciones estaban procesadas por un Vocoder o generadas por síntesis de voz, abundando en la idea de “mensaje transmitido” que tienen sus letras.

Las letras de Kraftwerk se enmarcan en la vida urbana y la tecnología de la Europa del siglo XX: los viajes en coche, en tren, los ordenadores personales, el teléfono, etc. Según sus propias palabras, los artistas alemanes de su generación debían intentar continuar avanzando a partir del punto muerto en el que quedó Alemania en 1933 con la llegada al poder de los Nazis. Sus letras son muy sintéticas, muy simples en su forma, y expresan gracias a esa sencillez una ambigüedad compleja y controvertida, siendo al mismo tiempo una celebración ingenua del mundo moderno, sus costumbres e inventos, y una sabia advertencia acerca de sus consecuencias. De una forma magistral consiguen transmitir simultáneamente un efecto alienante, nostálgico y escapista, y una cierta incomodidad y preocupación. Su idea base era convertir al grupo en una estación de radio que emitía mensajes para todo el mundo. Mensajes sencillos, que cualquiera podía hacer suyos.

Los primeros tres álbumes de Kraftwerk de Hütter y Schneider fueron todavía parcialmente acústicos y experimentales, pero en 1973 el sonido de Kraftwerk pasó a ser decididamente electrónico con rasgos de pop melódico. El resultado fue su álbum “Autobahn”, considerado por muchos expertos un punto de inflexión que constituyó uno de los primeros álbumes de electropop. Las canciones estaban compuestas por fragmentos de melodías alargados y reducidos, con efectos de sonido alternados -una característica que hasta hoy determina la esencia de Kraftwerk. Además, Hütter y Schneider cantaron por primera vez. “Autobahn” es el último álbum que publicaron con Philips. Con él consiguieron su primer Disco de Oro, y gracias a este éxito, firmaron con EMI en 1974, apoyados por su propio sello discográfico, Kling Klang. Después siguieron tres álbumes muy influyentes para la música pop: “Radioactivity” (1975), “Trans-Europe Express” (1977) y “The Man Machine” (1978).

Las aportaciones, los conocimientos y la influencia del productor Conny Plank también fueron decisivas para definir el sonido del grupo. Plank trabajó con otros grupos alemanes, como Can, Neu!, Cluster y Harmonia. Gracias al trabajo con Kraftwerk, el estudio de Plank cerca de Colonia se convirtió en uno de los estudios más solicitados de Europa en los años 70. Plank produjo los primeros cuatro discos de Kraftwerk, pero dejó de trabajar con ellos tras Autobahn (1974), su primer éxito comercial.

La “formación clásica” de Kraftwerk se formó en 1975 para la gira de Autobahn. El grupo se presentó como cuarteto electrónico, con Wolfgang Flür y Karl Bartos a cargo de las percusiones electrónicas. Esta formación fue la imagen pública del grupo hasta finales de los años 80. (Flür se unió al grupo en 1973 como batería, para una actuación en televisión en la que usaron por primera vez su percusión electrónica, construida por ellos mismos). Con esta formación grabaron y presentaron en directo por todo el mundo sus álbumes más conocidos: Radio-Activity (1975), Trans-Europe Express (1977), The Man Machine (1978), Computer World (1981) y Electric Café (1986), así como el tema oficial del Tour de France de 1983. A partir de ahí Bartos y Flür abandonaron el grupo, y fueron substituidos por varias personas, sin llegar nunca otra vez a una formación tan estable. La crisis del grupo fue provocada por el cambio tecnológico que Hütter y Schneider querían llevar a cabo, digitalizando todo su catálogo de canciones y sonidos. Esta tarea agotó a los “otros dos” miembros del grupo. El primer fruto de ese trabajo, ya sin Bartos ni Flür, fue el recopilatorio The Mix (1991), que recogía los temas clásicos de Kraftwerk reprogramados.

Aunque durante la década de los 90 actuaron en directo por todo el mundo, no publicaron nada más hasta el año 2000, cuando los organizadores de la Exposición Universal de Hanover les encargó el tema oficial: Expo 2000, que se publicó como single en diferentes versiones y luego como álbum, y que fue muy polémico en Alemania, por tratarse simplemente de un jingle de veinte segundos en los que un vocoder repetía las palabras “Expo 2000” en diferentes idiomas.

En 2003 publicaron un álbum con temas nuevos, pero basado en el tema Tour de France, que cumplía 20 años. Un álbum en directo (“Minimum Maximum” en 2005) y una reedición de sus álbumes clásicos (“The Catalog” en 2006) han sido los siguientes proyectos del grupo.

 

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